10 trucos para eliminar de una vez el olor de tus zapatillas

Las zapatillas suelen oler debido a una combinación de factores. En primer lugar, nuestros pies tienen aproximadamente 250,000 glándulas sudoríparas, y cuando usamos zapatillas durante actividades físicas o en climas cálidos, es natural que nuestros pies suden para regular su temperatura. Esta transpiración contiene agua y sales, y cuando se acumula en el interior de las zapatillas, crea un ambiente húmedo y cálido propicio para la proliferación de bacterias y hongos.

Las bacterias y hongos se alimentan de la humedad y las células muertas de la piel que se desprenden de nuestros pies. A medida que se desarrollan, descomponen estas sustancias y liberan compuestos volátiles, que son los responsables del mal olor.

Además, algunas bacterias específicas, como las que causan el pie de atleta, producen enzimas que empeoran la situación al descomponer la queratina de la piel, generando un olor aún más fuerte y desagradable.

La falta de ventilación también es un factor clave. Si no permitimos que nuestras zapatillas se sequen adecuadamente entre usos, la humedad y las bacterias tienen más tiempo para multiplicarse. Esto es especialmente relevante si usamos las mismas zapatillas todos los días o si las guardamos en lugares cerrados, como bolsas deportivas o armarios sin ventilación.

1. Lavado a mano: Lavar a mano las plantillas y los cordones de tus zapatillas con agua tibia y jabón suave es una práctica recomendable para eliminar la acumulación de bacterias y olores. Al hacerlo, puedes asegurarte de que estas partes, que a menudo retienen la humedad y las bacterias, estén limpias y frescas. Además, permite un mejor control sobre la limpieza en comparación con simplemente lavar toda la zapatilla, ya que algunas partes pueden ser más propensas a acumular suciedad y olores que otras.
2. Bicarbonato de sodio: El bicarbonato de sodio es un desodorante natural efectivo para combatir los olores en las zapatillas. Al espolvorearlo dentro de ellas y dejarlo reposar durante la noche, el bicarbonato de sodio absorbe los olores desagradables, dejando las zapatillas más frescas y libres de malos olores. Después de un tiempo de reposo, simplemente sacúdelas o límpialas con un paño para eliminar el bicarbonato y estarán listas para usar nuevamente. Esta es una solución rápida y sencilla para mantener tus zapatillas sin olores molestos.
3. Bolsas de gel de sílice: Las bolsas de gel de sílice son excelentes para reducir el mal olor en las zapatillas. Al colocar estas bolsas en el interior de tus zapatillas cuando no las estés usando, absorberán la humedad presente en el calzado, lo que a su vez reduce la proliferación de bacterias que causan malos olores. Esto ayuda a mantener tus zapatillas más frescas y libres de olores desagradables, además de prolongar su vida útil al prevenir el deterioro causado por la humedad. Es una solución simple y efectiva para el cuidado de tus zapatos deportivos o casuales.
4. Secado adecuado: El secado adecuado de tus zapatillas es esencial para prevenir el mal olor. Después de usarlas, es importante dejarlas secar completamente al aire libre antes de guardarlas. La humedad atrapada en las zapatillas puede crear un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y hongos que causan malos olores. Evitar guardar las zapatillas cuando están húmedas contribuye a mantenerlas frescas y libres de olores desagradables, al tiempo que prolonga su vida útil. Esto es especialmente importante después de actividades deportivas o en climas húmedos donde la transpiración es común.
5. Spray desodorante: El uso de un spray desodorante específico para calzado deportivo o zapatillas es una excelente manera de mantener tus zapatos frescos. Al rociar el interior de las zapatillas con este producto, puedes eliminar temporalmente los olores desagradables y prevenir su reaparición al inhibir el crecimiento de bacterias y hongos. Asegúrate de dejar que las zapatillas se sequen completamente después de aplicar el spray antes de usarlas nuevamente. Esto es una solución rápida y efectiva para mantener tus zapatillas sin malos olores entre lavados y cuidar mejor tu calzado deportivo.
6. Limón y sal: La combinación de jugo de limón y sal es una solución casera efectiva para eliminar olores en las zapatillas. El limón actúa como un desodorante natural gracias a sus propiedades antibacterianas y su agradable aroma cítrico. La sal, por otro lado, ayuda a absorber la humedad, reduciendo así el ambiente propicio para el crecimiento de bacterias y hongos causantes de malos olores. Al frotar esta mezcla dentro de las zapatillas y dejar que actúe durante un tiempo, puedes refrescar tus zapatos de manera económica y ecológica, evitando el uso de productos químicos más agresivos.
7. Aceites esenciales: La aplicación de unas gotas de aceite esencial de lavanda, árbol de té o eucalipto en las plantillas o el interior de las zapatillas es una forma natural y aromática de combatir los malos olores. Estos aceites esenciales no solo ofrecen un agradable aroma, sino que también poseen propiedades antibacterianas que ayudan a prevenir la proliferación de bacterias y hongos en el interior de las zapatillas. Esto no solo refrescará tus zapatos, sino que también contribuirá a mantenerlos libres de olores desagradables a largo plazo, sin necesidad de utilizar productos químicos fuertes.
8. Zapatillas intercambiables: La rotación de zapatillas es una estrategia inteligente para combatir los malos olores. Si tienes varios pares, alternar su uso permite que cada par se seque completamente y que el sudor se evapore antes de volver a utilizarlo. Esto reduce la acumulación de humedad y la proliferación de bacterias y hongos causantes de malos olores, ayudando a mantener tus zapatillas frescas y prolongando su vida útil. Además, tener opciones diferentes de zapatillas te permite adaptarte mejor a diferentes actividades y condiciones, lo que también puede ser beneficioso para la comodidad de tus pies.
9. Plantillas de carbón activado: Las plantillas de carbón activado son una solución eficaz para combatir los olores en tus zapatillas. El carbón activado es un material poroso que tiene una gran capacidad de absorción de olores y humedad. Al colocar estas plantillas en tus zapatillas, ayudan a mantener el calzado fresco al absorber los olores desagradables y prevenir la proliferación de bacterias y hongos. Además, son fáciles de reemplazar cuando sea necesario, lo que facilita el mantenimiento de tus zapatillas en óptimas condiciones y la eliminación de malos olores de manera conveniente.
10. Congelación: La congelación es una técnica inusual pero efectiva para eliminar bacterias y olores en las zapatillas. Al colocar tus zapatillas en una bolsa de plástico y meterlas en el congelador durante la noche, el frío extremo mata las bacterias y hongos que causan malos olores al detener su crecimiento. Sin embargo, es importante recordar que esta técnica no eliminará los olores existentes, solo prevendrá su aparición futura. Después de sacar las zapatillas del congelador, asegúrate de dejarlas secar completamente para evitar la acumulación de humedad antes de volver a usarlas.

Recuerda que la prevención es clave. Mantén tus pies limpios y utiliza calcetines de materiales transpirables, y trata de airear tus zapatillas regularmente. Con estos consejos, tus zapatillas o deportivas deberían oler mucho mejor. ¡Espero que estos trucos te ayuden!