
Por qué el minimalismo puede hacerte más feliz
Son muchas las personas que últimamente defienden el minimalismo como una nueva forma de alcanzar la felicidad. Pero ¿Qué significa el minimalismo para la felicidad? Las redes sociales, una agenda repleta de contactos, planes, vida social… todos son incentivos. Pero ¿Está nuestro cerebro preparado para todos esos estímulos? La realidad es que no.
No obstante es posible minimizar en varias áreas de nuestra vida. No tienes que salir corriendo a vender inmediatamente tu casa o tirar las tres cuartas partes de sus pertenencias. Hay varias formas de minimizar.
Uno puede actuar reduciendo la cantidad de horas que dedica al trabajo y otro reduciendo la cantidad de objetos que tiene en casa. Las personas no somos números y cada una encontramos paz y felicidad en cosas diferentes. Solo averigua que funciona para ti y ponlo en práctica.
Sobreestimulación
La sociedad está cambiando más rápido que nuestro cerebro: “Piensa en ello como en un software para el cual nuestro ‘hardware’ no es adecuado. Una nueva solicitud de amistad te irá bien, a alguien le gustas, pero la realidad es que nuestro cerebro no está construido para conocer y recordar a mucha gente.
Si tienes una agenda abarrotada con cosas, de las cuales hay muchas que no te gustan demasiado, tu cerebro se sobreestimulará. Las personas que minimizan sus actividades y están deliberadamente menos ocupadas, a menudo tienen menos amigos pero esas amistades que tienen a menudo son más estrechas.
Los contactos sociales se vuelven más cercanos
Muchos minimalistas ya no quieren nada más aunque hay que decir que no es un camino exento de dificultades, especialmente al principio: “Supongamos que es un hombre de negocios trabajador al que conoce mucha gente. Si un buen día decides trabajar menos horas, vender tu coche de lujo y cambiar tu chalet por un piso más pequeño, pueden surgir reacciones y que muchas lo vean como algo extraño. ¿Lo normal no es aspirar a tener más de todo, coches mejores, casas más grandes, mas amigos,…?
Habrá mucha gente que no lo entienda y que te vean como un bicho raro. Pero el reducir tu círculo te permitirá dedicar más tiempo a un menor número de personas y tener relaciones más estrechas. Ya lo dice la frase, el que mucho abarca…
¿Minimalismo para ricos?
El ejemplo anterior podría dar la sensación de que el minimalismo es solo para personas ricas pero nada mas lejos de la realidad. Hay muchas personas que conscientemente eligieron vivir de manera más frugal.
Tenían un sueldo medio y no eran ricos. Muchos vendieron su coche, y cuando comenzaron a trabajar menos, empezaron a conformarse con menos. Lo mejor es que ahora ganan menos pero les queda más dinero a final de mes.
¿Objetivos a corto plazo o misión en la vida?
La gente actualmente se enfoca demasiado en las metas a corto plazo y pierden el foco de su misión en la vida. Esto último puede sonar como algo muy importante, pero no es para tanto.
Solo coge bolígrafo y papel y escribe la primera misión de vida que te venga a la cabeza. La misión de vida que suele surgir al hacer este ejercicio suele acercarse bastante a la misión real.
Para ello es importante decidir y actuar desde el corazón, como si estuvieras viviendo tus últimos días. Solía estar decepcionada cuando teniendo mucho trabajo que hacer, un día me tiraba toda la mañana hablando con una amiga. «Mierda, he perdido toda la mañana!». Ahora intento no ser tan dura conmigo, al fin y al cabo estoy segura de que cuando esté en mi lecho de muerte, probablemente me alegraré de ese momento y no pensaré en el trabajo que deje de hacer.
Método BÁSICO para alcanzar tu misión vital.
Existe un método BÁSICO que puedes poner en práctica y con el que puedes entrenar para cumplir con tu misión vital:
● Atrás: Da un paso atrás.
A veces la vida funciona como una carrera de ratas, no hay tiempo para pararse a pensar, solo continuar. Dar un paso atrás supone pararse a pensar en donde estamos y hacia donde vamos.
● Atención: Quédate quieto, presta atención al ahora.
Escucha no solo tu mente, sino también tus sentimientos. ¿Qué dice tu corazón? Los minimalistas prestan más atención al aquí y ahora y se centran, por ejemplo, en la meditación, la atención plena, la música y la danza.
● Seleccionar: Selecciona lo que mejor se adapte a su misión de vida.
Si has dado un paso atrás y tienes clara cual es tu misión en la vida, te será más fácil determinar que acciones se adaptan a esta misión y actuar en consecuencia.
● Invertir: ¿Qué voy a hacer para mantener la misión de mi vida?
Una vez que hayas hecho una selección basada en sus sentimientos, puedes comenzar a invertir. ¿Qué debo hacer o no hacer para permanecer en la misión de mi vida?
● Cortar: ¿Tengo que dejar algo fuera?
Supón que la misión de tu vida es reducir al mínimo tu impacto sobre el planeta. En este caso probablemente deshacerte de tu coche sea una buena idea que encaja a la perfección con tu misión de vida.
● Sentido: Experimentar el sentimiento.
El sentido no es otra cosa que experimentar el sentimiento de felicidad que nos trae la dirección que hemos elegido para nuestra vida, en función de nuestra misión vital. No solo se trata de coger un camino y andar por él como si fuéramos autómatas sino que debe tener un sentido y debe aportarnos satisfacción y felicidad.

