
6 cosas que no deberías hacer cuando tienes un ataque de ira.
Puede ser un coche que no te deja pasar, un jefe quisquilloso o una inocente palabra de tu suegra que simplemente te enoja. Estamos hablando de la ira, un sentimiento que se genera en nuestro estómago y que, a menudo, conduce a reacciones exageradas, que lejos de arreglar los problemas, lo que suele hacer es agravarlos.
Cuando estamos cabreados o agresivos, respiramos más rápido, la presión arterial aumenta y no podemos controlar nuestro comportamiento correctamente. Hay algunas cosas que no debes hacer cuando estás cabreada. Aquí están loas siete cosas más importantes que debes evitar:
1. Conducir un coche durante un brote de ira.
No es buena idea conducir cuando uno está cabreado. Cuando estamos con la ira en máximos niveles tendemos a tener «visión de túnel» y, por lo tanto, a realizar maniobras de conducción peligrosas. Por tanto esta es una de las cosas que debes evitar si estás cabrada.
2. Ir de compras cabreada.
Si decidimos salir de compras con ira en el estómago, lo más probable es que acabemos comprando cosas que no necesitamos o lo que es peor, comprar prendas que no nos podemos permitir, lo cual puede salirnos bastante caro. Si estás muy cabreada, no toques la tarjeta de crédito si no quieres tener que arrepentirte cuando todo pase.
3. Comer en la fase de ira.
Cuando la ira te atrapa, muchas veces la tendencia es a asaltar la nevera y tirar de cosas grasas. principalmente dulces, pero también cosas muy grasas como pizza, hamburguesas o patatas fritas. Igual, trata de alejarte de estos alimentos cuando esté muy cabreada.
4. Beber alcohol durante un brote de ira.
Esto si que es típico cuando alguien se cabrea: Ir directa al bar a pillarnos la de nuestra vida. Lo que probablemente no hayas pensado es que el alcohol puede intensificar sentimientos como la ira y hacer que los impulsos agresivos salgan con más facilidad. Así pues si te ves muy cabreada solo aléjate del alcohol.
5. Escribir cartas o correos electrónicos.
Otro gran error es mandar algún correo electrónico o mensaje cuando estamos cabreadas. Esto puede hacer que digamos cosas que en frío jamás se nos ocurriría. Es mejor dejar que la ira se vaya antes de hacerlo. Esperar unas horas puede ser una buena opción, el mundo generalmente se ve completamente diferente pasado un rato.
6. Duerme si has discutido antes.
Si te acuestas cabreada o con ira, puede ser difícil conciliar el sueño porque el cuerpo tarda al menos media hora en relajarse nuevamente. La calidad del sueño también se resiente con la ira dado que tiendes a despertarte con más frecuencia. Esto hará que durmamos peor y nos cueste más levantarnos.
Entonces te deshaces de la ira
La distracción de todo tipo es algo bastante efectivo para acabar con la ira: llama a tu mejor amigo, haz manualidades o escucha tu música favorita. El ejercicio suele ser lo mejor: esto puede hacer que se reduzcan las hormonas del estrés más rápido y aumentar los niveles de endorfinas en nuestro organismo, algo que nos hace sentir bien.
No es necesario matarse a hacer deporte, con un paseo ya empezarás a notar cosas positivas. El yoga o la meditación también son buenas opciones para reducir nuestros niveles de ira.

