
5 razones para quedarse en casa de una familia en tu próximo viaje
Cada vez más viajeros buscan encuentros auténticos con lugareños durante sus vacaciones. ¿Y dónde mejor encontrarlo que directamente en casas de residentes? ¡No dudes y elige dormir en casa de una familia!
Y es que dormir en casas familiares de locales no solo es una experiencia muy agradable, sino que también tiene un impacto positivo en la vida de la familia. ¿Quieres saber más? Pues no dejes de leer las 5 razones por las que te animamos a que te alojes en casa de una familia y vivas una experiencia especial en tu próximo viaje.
Viaja con un impacto positivo
Viajar aporta numerosos beneficios para las personas pero puede ser incluso aún más positivo. Es por eso que te traemos 5 razones para quedarte en una casa familiar en tu próximo viaje:
1. Conocer a lo residentes locales.
El contacto con una familia anfitriona en una casa familiar es mucho más personal que, por ejemplo, con el personal de un hotel. No te quepa duda de que la familia hará todo lo posible para que te sientas como en casa desde el minuto 1. Al principio siempre lleva algo de tiempo acostumbrarse, pero después de unas horas parecerá que os conocéis desde hace años.
Incluso si no habláis su idioma, harán lo que sea porque os sintáis como en vuestra casa o incluso mejor! A veces, el clic es tan fuerte que los viajeros se mantienen en contacto con la familia anfitriona después de sus vacaciones.
2. Conocer su día a día.
Pasar un día trabajando en la tierra, jugando con los niños, yendo juntos al mercado y ayudando con la cocina. En una casa de familia, tienes la oportunidad de unirte a la vida cotidiana de los lugareños por un día. A veces aprendes a comer con las manos, otras veces ayudas con las ofrendas al templo familiar. Dormir en la casa de una familia es la mejor manera de experimentar de cerca las tradiciones y costumbres y aprender sobre la vida en el país que estás visitando.
3. Los platos más sabrosos.
Nada es más delicioso que una comida casera preparada con mucho amor. Eso es exactamente lo que comerás en la casa de la familia donde te alojes todas las noches. Bastante lógico, si lo piensas.
Cuando uno recibe invitados especiales suele hacer todo lo posible para que los visitantes disfruten al máximo de la comida y de la estancia. ¿Vegetariano? No hay problema. Especialmente en una casa de familia, la anfitriona tiene la oportunidad de ser creativa y cocinar algo diferente para ti.
4. Vive momentos inolvidables.
El anfitrión de pronto saca una guitarra y resulta ser un gran músico. Por la noche disfrutarás conociendo amistades y brindando con vino de arroz casero. O puede suceder que te inviten a una boda o una fiesta tradicional de pueblo. En una casa de familia experimentarás momentos y vivirás situaciones inolvidables que ningún hotel puede ofrecerte.
5. Viaja generando un impacto positivo.
Al dormir en una casa de familia, inmediatamente estarás aportando algo a los residentes locales. Después de todo, sus euros van directamente a la familia anfitriona.
Para muchas familias, alquilar sus habitaciones les proporciona un ingreso adicional muy importante, con el que pueden ahorrar para los estudios de sus hijos, por ejemplo. Además es una hermosa experiencia y les estarás dando la oportunidad de un futuro mejor. Eso es viajar generando un impacto positivo.
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Diferencias entre una casa familiar y un hotel familiar.
Puede parecer que las casas familiares para alojarse salen hasta de debajo de las piedras, pero no todos los alojamientos con la palabra ‘casa de familia’ en el nombre ofrecen la oportunidad convivir con residentes. Mucho en realidad son más pequeños hoteles familiares.
El aspecto más importante de una casa de familia es el contacto directo con la familia anfitriona y la posibilidad, por ejemplo, de comer juntos o realizar actividades. En un hotel familiar a pequeña escala, tiene menos contacto con la familia. Será más como estar en un hotel pequeño. Eso si, en ambos casos, estarás contribuyendo con las economías locales y será mejor que alojarte en un resort o gran hotel.
¿Dormir en una casa de familia puede ser un dolor?
Dormir en una colchoneta, darte duchas frías o la falta de privacidad es lo que nos viene a la cabeza cuando pensamos en casas familiares pero déjame decirte que estás equivocada. Por supuesto, hay lugares donde vivirás con lo más básico, pero es un gran malentendido que todas las familias anfitrionas siempre sean familias pobres.
Hay mucha variedad en los alojamientos familiares que te vas a encontrar. Desde una granja familiar en las montañas del Perú hasta un complejo tradicional en los arrozales de Indonesia. Una cosa es segura: obtendrás experiencias más auténticas y aunque nosotros te demos 5 razones, estamos seguros que tú encontrarás muchas más para alojarse en una casa familiar.

